Decora las paredes con la técnica del stencil, pintando con plantillas

Una buena forma de darle color de manera original a las paredes, o tal vez a los muebles, es con la técnica del stencil o estarcido. Esta técnica de arte urbano, puede dar grandes resultados en el hogar, solo es cuestión de animarse.

Básicamente el stencil consiste en pintar con una plantilla, plástica o de cartón, cualquier superficie. Esta plantilla está cortada en su interior con el dibujo o el patrón que se utilizará para pintar. Luego con diversos elementos se aplica la pintura sobre la misma, quedando impreso el dibujo en la pared al retirar la plantilla.

El motivo que escojas dependerá del contexto, ya que puedes buscar modelos infantiles si estás decorando la habitación de un niño. Pero esto no se limita al cuarto de los pequeños, para cuartos de adultos las frases y dibujos geométricos o florales lucen muy bien. Por otra parte el stencil con una palabra o juego de palabras con distintos tamaños o tipografías pueden quedar de maravillas en una sala moderna.

Crea las plantillas con tus propias manos

El armado de la plantilla es realmente sencillo. Primero debes conseguir una placa de acetato (o cartón) y escoger el motivo que más te guste. Luego lo recortas con un cúter (cuchillo cartonero o trincheta) de manera prolija, ya que esto será la base de para tus futuras aplicaciones. Tienes que tener cuidado que el corte sea prolijo, que no tenga ninguna fisura, ya que esto permitiría que la pintura se salga de su lugar ocasionando manchas en el dibujo.

De otra forma puedes encontrar muchos diseños en revisas especializadas o en la web. También se pueden adquirir variedad de diseños en tiendas de bricolaje, de pintura o tiendas online.

Cómo aplicar la pintura sobre la plantilla

La pintura que tienes que utilizar, dependerá de la superficie en la que quieras aplicarlo. La idea del stencil se suele asociar con el uso de aerosol, pero puede ser peligroso si no está habituado a manipular ese tipo de pintura. Puedes usar pintura acrílica, es muy cubritiva y la encuentras en varios colores. Para aplicarla, puedes recurrir a esponjas, algodones, rodillos.

Pintar con plantillas puede resultar muy divertido, y es un proceso simple y sencillo para aportarle color a tu casa. Solo basta buscar el diseño y los colores adecuados para el ambiente que desees decorar.

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