El amarillo es un color clásico que da mucha luminosidad a los ambientes en donde se utiliza, es una tonalidad especial para combinar con blanco, negro y varios más.
Actualizado el 25 de marzo de 2024 - Escrito por Silvia
Aunque es un color del que se ha abusado muchísimo, del blanco se pasó directamente a pintar de amarillo y todos los interiores hace unos años eran amarillos, es el color más luminoso que hay. Incluso más que el blanco. Es un color que refleja la luz, por lo tanto muy alegre y nos proporcionará luz, aún en las estancias más oscuras de la casa.
Hay muchísimas tonalidades donde elegir. Desde amarillo limón, vainilla, mantequilla, y los que tienden más a naranja. Otros más verdosos como los amarillos lima muy cercanos a las tonalidad verdes, tonalidades frescas y muy atractivas para cocinas o habitaciones infantiles.
Es un color que combina bien con azules, con el marino queda muy bien, y resulta muy elegante. Perfecto para un salón. Con morados, muy bonito para un dormitorio principal, al igual que el gris oscuro. Con todo tipo de verdes da una decoración muy fresca. Con naranjas, resulta muy alegre, muy recomendable para dormitorios infantiles. Con blancos, plena luminosidad, ideal para un baño o una cocina.
También combina con casi todo tipo de maderas, aunque trataremos de evitar las demasiado claras (tipo arce), pero si lacado blanco.
Colores a evitar: el gris demasiado pálido, otros amarillos (son difíciles de combinar entre sí), el rojo, a los españoles nos recuerda demasiado a la bandera y no nos gusta, aunque en otros países, si gusta esta combinación.
Al tratarse de un color que da tanta luz, podemos pintar toda la habitación del mismo color sin ningún peligro, incluso el techo. Si el techo carece de molduras, mejor pintar toda la habitación del mismo color (paredes y techo). Si tiene molduras, mejor el techo en blanco, al igual que las molduras.
Va muy bien para los techos de cocinas o baños, ya que hace muy buen contraste con un alicatado blanco, por ejemplo. Es un color que sirve tanto para ambientes clásicos como modernos.
Como pueden ver, es un color que va bien para toda la casa. Combinando con distintos colores en cada estancia, podemos conseguir una unidad cromática, pero diferenciando cada ambiente gracias a los complementos.