Ideas para decorar en blanco sobre blanco

No hay color que favorezca más a la iluminación y al espacio que el blanco, eso seguramente ya lo has escuchado. Otra de las cualidades destacadas del mismo es destacar objetos en otros tonos, por lo que se constituye en un color muy apreciado en la decoración de interiores.

El blanco es un color especial para ambientes de reducido tamaño, cielos bajos, ambientes oscuros por la escasez de la iluminación natural. Y es uno de los colores que mejor se lleva con tonos intensos y los acompañan a la perfección. En contraste a sus bondades, el blanco puede ser algo inquietante para los dormitorios, y es muy difícil mantener su limpieza, especialmente con niños en casa. El uso de pinturas lavables en las paredes pueden echarnos una mano.

Pero si eres amante de la luminosidad y la pureza del color blanco no puedes dejar de probar decorar tu casa con puro blanco. Utilizando telas, muebles y piezas de decoración en blanco sobre paredes de igual color logramos un «blanco sobre blanco» otorgando mas luz al espacio, generando un ambiente reluciente y muy luminoso.

Muchas veces dentro de la familia de los blancos incluimos otros colores como el crudo, el blanco roto, o los grises muy suaves. Estas tonalidades pueden combinarse para crear un ambiente original y de aspecto delicado.

No es necesario que todo luzca igual, sino que puedes valerte de otras tonalidades en pequeños detalles para crear una nota de color en el ambiente que estés decorando, es así que con algún almohadón, un cuadro o una alfombra puedes crear un punto focal en tu sala, o en tu cocina. También puedes usar maderas, acero o detalles en color negro.

Ya si tienes un ambiente luminoso y deseas que luzca todo su esplendor, como si tienes un espacio oscuro y deprimido, la combinación de blancos es una buena alternativa para iluminar el espacio.

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