Los colores más adecuados de acuerdo al clima y la iluminación para pintar las paredes, su influencia en el aspecto del ambiente y las sensaciones que provoca.
Actualizado el 29 de mayo de 2024 - Escrito por Ayelén
En variadas ocasiones nos guiamos exclusivamente por nuestros gustos a la hora de elegir el color para un ambiente de nuestro hogar. Comenzamos con la pintura de las paredes, lo cual constituye el primer cambio en la habitación. Luego renovamos los muebles cuidando de que cada uno de ellos sea ubicado en el lugar más conveniente. Posteriormente colgamos vistosos cuadros e incorporamos llamativos accesorios teniendo en cuenta que la presencia de cada uno de ellos contribuirá a que la habitación sea única y acogedora.
Sin embargo, después de mucho esfuerzo y trabajo el resultado final no es el que esperábamos. En la habitación hay “algo” que no nos convence totalmente pero no podemos identificar que es. ¿Qué pudo haber salido mal?. La respuesta a esta pregunta nos lleva al primer paso importante, fue elegir el nuevo color de las paredes. Tal vez la tonalidad no era la adecuada para la luz disponible, la orientación de la habitación, o la temperatura del lugar, aunque esto parezca un punto irrelevante.
Debemos tener presente que la elección del color es mas fácil y acertada cuando consideramos el tipo de clima. Si imaginamos la misma habitación ubicada en una región muy cálida y en una muy fría, notaremos grandes diferencias. En la región soleada, un color claro y frío ayuda disminuir la sensación de calor, haciéndonos sentir mas cómodos. Sin embargo en la región con menos sol y menores temperaturas, ese mismo color no nos favorece, ya que la sensación será de frío.
Los colores claros y pasteles favorecen a las habitaciones en regiones con mucho sol haciéndolas más confortables. El blanco puro y los grises son colores que brindan un sensación de frescura. También son muy adecuados las distintas tonalidades azules, desde las más suaves a las más intensas y oscuras.
Por otra parte los colores cálidos son perfectos para habitaciones utilizadas por la tarde en zonas mas frías. Sin embargo debemos tener presente que un color oscuro no favorece demasiado a los ambientes pequeños y con poca iluminación natural. Los colores naturales, también conocidos como neutros cálidos son muy aconsejados para zonas frías. Algunos de ellos son los tonos tierra, el café, beige, arena, ocre, y toda la variada gama de los colores de la madera.