El color verde aceituna, también llamado verde oliva, es una tonalidad perfecta para usar en la pintura y la decoración de cualquier habitación y ambiente de casa. Estas son algunos de sus cualidades y mejores combinaciones.
El verde aceituna es un tono sutil que posee una habilidad para adecuarse a diferentes ambientes y situaciones. Esto convierte en un color verde atractivo tanto en la moda como en la decoración, añadiendo toques de sofisticación y serenidad a nuestros hogares.
Para definir a este color se toma como referencia el fruto del árbol olivo, que es la oliva, también llamada aceituna. La misma durante su desarrollo hasta su maduración obtiene distintas coloraciones, desde un verde claro hasta un morado casi negro. Pero cuando hablamos del color notamos un verde distinto, justamente la coloración que toman las olivas procesadas y comestibles.
Si intentamos explicar cómo es el color verde aceituna, podríamos decir que es un verde amarillento, pero más oscuro. No es un verde intenso, más bien es suave. Una forma de crear el color aceituna con pintura es mezclando los colores amarillo y negro.
El verde aceituna tiene varias características y significados. Es un color profundo, tranquilo y extremadamente refinado. Estos mismos efectos se ven tanto en la ropa que las personas suelen usar, como en cómo en la decoración de interiores.
En decoración tiene diversos resultados con respecto a la cantidad que se utilice y los colores con los que sea combinado. Es un tono muy elegante y perfecto para grandes superficies como paredes, pero también como color de acento en pequeños detalles.
El verde aceituna es fácil de mezclar con otros colores, pero no todos resaltan sus características. Solo ciertas tonalidades son las apropiadas para usar junto a este verde al decorar espacios, permitiendo así construir ambientes elegantes, atractivos y únicos al mismo tiempo.
Azules: toda la gama de azules son aptos para generar combinaciones agradables. A esta dupla es necesario acompañarla de colores claros si no queremos que el ambiente pierda iluminación.
Blanco y negro: El black & white es perfecto para crear ambientes elegantes y modernos, donde es muy apropiado integrar otros colores y suavizar el efecto de contraste, haciendo a la ambientación mucho más agradable.
Colores cálidos: Contrariamente al efecto elegante y fresco que produce el verde, existe su complemento mucho más cálido y vibrante. Los naranjas, púrpuras e incluso el rosas pueden ser buenos compañeros.
Otros verdes: Siempre es un acierto combinar dos colores de la misma familia, y en éste caso creará más variedad al conjunto. Por ejemplo en un ambiente que has pintado una o más paredes de verde aceituna puedes usar detalles pistacho o verde seco. Ambos colores muy distintos, pero sumarán variedad a la paleta cromática de tu decoración sin lucir desencajados.
Ya sea en la ropa o en la decoración, este color siempre agregará un toque sofisticado, pero a la vez tranquilo. Su presencia nos recuerda la belleza de lo simple y cómo puede transformar nuestro entorno en algo elegante y agradable.