Cómo elegir los colores de pintura adecuados para tu oficina en casa y crear un ambiente propicio para la productividad y el bienestar.
Actualizado el 4 de mayo de 2024 - Escrito por Pablo
Desde elegir los muebles adecuados hasta seleccionar los colores de pintura para una oficina en casa, cada detalle contribuye a que tengas un entorno favorable para mejorar tu concentración y bienestar durante las horas de trabajo.
Además de establecer un horario fijo para el trabajo, o eliminar distracciones para aumentar la productividad, una recomendación fundamental es crear un espacio de trabajo adecuado. Es decir que debes buscar un lugar tranquilo de tu hogar y libre de distracciones donde puedas concentrarte. A esta lugar puedes adecuarlo con los muebles necesarios para realizar tu actividad. Está claro que el escritorio y un buen asiento son los componentes fundamentales de tu home office. Pero puedes sumar algún mobiliario más, como estanterías para libros y un sofá, si tienes el espacio suficiente. Por el contrario, si tu espacio es reducido la mejor opción son los escritorios pequeños, un asiento cómodo y estantes flotantes si los necesitas. Aunque solo sea un escritorio pequeño, será suficiente para ordenar tu trabajo de forma espacial y mentalmente.
A parte de lo anterior, una mano de pintura cambiará por completo el aspecto de cualquier espacio, y seleccionar el color perfecto para tu oficina en casa es crucial. Deberás buscar un tono que pueda inspirarte, que logre mantener alejado el estrés creando un ambiente relajado, y que también no cree fatiga visual durante una larga jornada laboral. Los siguientes colores cumplen con estas premisas, generando un espacio agradable y apropiado para el trabajo:
El gris transmite seriedad y elegancia, creando un ambiente de trabajo formal y moderno. Es un color perfecto si quieres aliviar tus ojos de la luz excesiva, o para concentrarte plenamente en tus notas o en la pantalla. Sin embargo, es importante equilibrar los colores oscuros con claros para evitar que el espacio se vea sombrío y deprimido. En este caso tener una buena iluminación sobre el escritorio es muy importante.
El clásico y versátil blanco es un color que hará de tu oficina un lugar luminoso, amplio y fresco. Es ideal para ampliar visualmente los espacios pequeños y para crear una atmósfera tranquila y de claridad mental. Además, el blanco es un lienzo perfecto para crear acentos de color y destacar elementos decorativos con facilidad.
Una opción única que aporta calma y un toque natural en tu espacio de trabajo. Los tonos de pintura verdes naturales ayudan a reducir el estrés y promover la concentración. En concreto el verde olivo puede combinarse con muebles de madera natural y accesorios metálicos para crear un ambiente acogedor y equilibrado.
Por otra parte los verdes suaves, como el verde menta o el salvia, son opciones refrescantes y relajantes para un home office. Estos tonos verdes transmiten armonía y bienestar, siendo ideales para un espacio de trabajo creativo y productivo. Los colores de pintura verdes suaves combinan con blanco, hueso, lino o gris claro para crear un ambiente luminoso y estimulante.
El negro o en su defecto un gris muy oscuro como el grafito, son colores envolventes y sombríos, pero acogedores para muchos. Tienen la particularidad de hacer «desaparecer» las paredes a simple vista y crear un clima de calma y sosiego. Es importante usarlos con moderación para evitar que el espacio se sienta opresivo. Combínalos con tonos más claros para lograr un equilibrio visual, sin olvidar tener una buena iluminación.
Como ejemplos, puedes considerar el azul noche, el petróleo o el azul marino. Estos azules oscuros son opciones elegantes y serenas de colores para una oficina en casa. Tienen la particularidad de lucir profundos, frescos y tranquilizantes. Los azules pueden combinarse con blancos, negros, grises y tonos beige suaves
Esta bella mezcla de gris y beige puede agregar calidez y sofisticación de manera simultanea a tu espacio de trabajo. El color Greige es un tono neutro y versátil que combina fácilmente con una variedad de colores y estilos de decoración, siendo una opción flexible adaptable a diferentes gustos y preferencias.
El color beige es otro clásico para interiores de todo tipo donde se busca un ambiente de serenidad, calma y elegancia. Y es por eso que es un tono cálido y neutro ideal para espacios de trabajo donde se busca una sensación de paz y tranquilidad. El color beige es muy versátil, y en ambientes de trabajo puede combinarse con blancos, maderas, cafés.
Los colores de pintura grises suaves o pálidos son opciones elegantes y a la vez muy luminosas. Es la alternativa perfecta a los colores blancos para una oficina en casa. Estos tonos grises crean un ambiente tranquilo y equilibrado, perfecto para concentrarse y trabajar de manera eficiente.
Y por último tienes para elegir en una paleta de azules suaves que harán de tu pequeño espacio de trabajo un sitio fresco y luminoso. Algunos azules suaves son el hielo, Alice blue, aguamarina y azul bebé. Estos tonos pueden ayudar a reducir el estrés y la fatiga mental, promoviendo un entorno de trabajo más productivo y relajado.
En definitiva, los colores de pintura puede tener un impacto significativo en la productividad y estado anímico en tu lugar de trabajo. Y cada opción que te hemos ofrecido te dará una oportunidad única para personalizar y optimizar tu oficina en casa, solo resta que la adaptes a tus necesidades y gustos.