La gama de colores verdes es muy extensa. Hay verdes suaves y verdes intensos, también tonos oscuros y pasteles. Y además tonalidades amarillentas y azuladas.
Actualizado el 19 de marzo de 2024 - Escrito por Pablo
El color verde es uno de los más buscados para decorar un ambiente. A pesar de esto, no es muy utilizado. Esto tal vez se debe al desconocimiento que se tiene para combinarlo, o para usar la tonalidad adecuada. Veamos la variada gama de colores verdes que se conocen en pintura de paredes, sus nombres, características y cómo combinarlos.
Es un verde claro, una de las tonalidades más suaves de toda la gama. Es probable que se tenga como referencia el color de la crema o el helado de menta. Refleja la luz y hace que el espacio se vea amplio y luminoso, además crea un efecto de frescura. Puede haber variaciones de la tonalidad en las distintas paletas de colores y marcas de pintura.
El verde menta puede ser combinado con tonalidades neutras como blanco y arena. Otros verdes como esmeralda, jade o verde azulado. Y en especial otros colores como morados, lavandas y rosa pastel.
Pasamos a un verde intenso y muy común. Un color que debería utilizarse solo para pintar una pared y para algunos detalles decorativos debido a su intensidad.
El verde manzana es alegre y vistoso, combina a la perfección con blanco, pero también con arena, grises, azules, amarillos y naranjas.
Es posible que se confunda con el manzana, aunque el pistacho suele ser un tono un poco más suave y apagado. Es la alternativa perfecta para pintar todo un ambiente o grandes superficies. Genera espacios frescos y muy agradables, especialmente luminosos cuando se acompaña de blanco.
Además suele combinarse al verde pistacho con blanco marfil, lavanda, cafés agrisados, y maderas claras y oscuras.
El verde azulado o Teal es la tonalidad más elegante de la gama de verdes. Puede usarse en cualquier ambiente de casa, tanto para pintar las paredes como color de acento. Es especial para la cocina, la sala o el dormitorio principal. Es una buena tonalidad para locales comerciales.
El color Teal puede combinarse con cenizas y otros grises suaves. También hace una buena pareja junto al arena o beis. Y es un buen equipo con el blanco y el negro, especialmente en ambientes modernos.
El verde aceituna toma su nombre del fruto del olivo, una vez procesado y en estado comestible. Se trata de un verde oscuro cercano al ocre, aunque puede haber variedad de tonalidades similares.
Como todos los verdes, combina con tonalidades neutrales tales como blanco, marfil, grises y negro. Pero el verde oliva en particular lo hace con beis, morados, chocolate, rosas, canela y dorados.
Se trata de una coloración elegante y profunda, que reviste de buena presencia el sitio donde se lo utilice. El esmeralda es especial para realzar una pared, para tapizados, cortinas, alfombras y detalles.
Combinar verde esmeralda no es tan sencillo, aunque se crean buenas uniones con marfiles, grises, blanco y tonos ocres ya sean suaves o más oscuros. El dorado y el negro crean un acento particularmente distinguido junto con el esmeralda.
Se lo considera como el color más rústico y apagado dentro de la gama de colores verdes. Se trata de un tono agrisado similar a las hojas de plantas secas a la sombra. Sin duda un tono apacible que transite ese mismo efecto en el espacio donde se lo use. Especial para dormitorios, salas y zonas de paso.
El verde seco combina con blanco roto, negro y cafés. Y si se pretende realzar la combinación con un tono más vivo es posible usar naranjas, terracotas y verdes intensos.
El verde suculenta es el mejor ejemplo de verde puro, aunque pueden haber variaciones y percepciones diversas. Un color que recuerda a la naturaleza, especialmente inspirado en las plantas suculentas o crasas.
Se trata de un color común para pintura. No es difícil de combinar, y aunque puede jugarse con muchos colores, lo mejor es acompañarlo de tonos neutros.
Antes de terminar destacaremos una coloración que puede encerrar distintos matices. Pero en general se trata de un verde cítrico, intenso y amarillento. Es adecuado para cocinas, cuartos infantiles y de adolescentes. También para playrooms, algunos locales comerciales, espacios relacionados con los niños y la diversión.
El verde limón puede combinar con arena, negro, fucsias, naranjas, amarillos. Justamente los colores intensos son los que aportan alegría y vitalidad al ambiente.
Por último dejamos a la tonalidad más oscura y seria de la gama de colores verdes. Se trata de un tono levemente agrisado y muy profundo que genera un clima de elegancia y solemnidad.
El verde safari es perfecto para la sala, y especial para frentes y fachadas. Combina con verdes claros e intensos, grises suaves y blanco.
La paleta de colores verdes es muy extensa, y hay muchas tonalidades de las cuales se puede aprovechar. Estos son algunos de las más distintivas y sus características particulares. No temas usar la que más te guste.